Funciones Especializadas y Estructura Proteica
Las proteínas de regulación son esenciales para mantener nuestro equilibrio interno. Algunas como la insulina y el glucagón controlan los niveles de glucosa en sangre, mientras que otras mantienen constante el pH del medio interno (aproximadamente 7.4). Proteínas como la ciclina regulan la división celular, un proceso fundamental para el crecimiento y la reparación de tejidos.
En cuanto a su estructura, las proteínas pueden clasificarse según su forma en: fibrilares (alargadas), globulares (circulares) y transmembrana (atraviesan la membrana celular). Las proteínas fibrilares, como el colágeno y la queratina, son mecánicamente fuertes e insolubles en agua. Están presentes en estructuras como uñas, pelo, tendones y cartílagos, proporcionándoles resistencia.
Las proteínas globulares, por su parte, tienen una estructura más compleja. Sus aminoácidos polares se orientan hacia el exterior (hidrofilicos), interactuando con el medio acuoso, mientras que los aminoácidos apolares se ubican en el interior (hidrofóbicos). Esta disposición crea cavidades conocidas como sitios activos, donde ocurren las reacciones enzimáticas.
🔍 Atención: La estructura determina la función. Una pequeña alteración en la secuencia de aminoácidos de una proteína puede cambiar completamente su forma y, por tanto, su capacidad para cumplir su función en el organismo.