La Sangre y los Vasos Sanguíneos
La sangre es mucho más que un simple líquido rojo. Es una sustancia especializada que transporta oxígeno, nutrientes y hormonas a todas las células, mientras recoge dióxido de carbono y otros desechos. También te protege de infecciones y ayuda a mantener constante tu temperatura corporal, un proceso llamado homeostasis.
Los vasos sanguíneos forman una red de "carreteras" por donde circula la sangre. Las arterias son conductos resistentes que llevan sangre desde el corazón hacia los tejidos. Las venas, con paredes más delgadas, devuelven la sangre al corazón. Los capilares, tan finos que solo permiten el paso de una célula a la vez, conectan arterias y venas dentro de los tejidos.
La sangre está compuesta principalmente por tres tipos de células: los glóbulos rojos que transportan oxígeno, los glóbulos blancos que combaten infecciones, y las plaquetas que ayudan a la coagulación cuando te lastimas.
🩸 ¡Asombroso! Si estiraras todos tus vasos sanguíneos en línea recta, darían la vuelta a la Tierra más de dos veces. ¡Eso es aproximadamente 100.000 kilómetros!