Digestión en Rumiantes
Los rumiantes (bovinos, ovinos, caprinos) presentan un sistema digestivo especializado con un estómago dividido en cuatro compartimentos, adaptación que les permite aprovechar la celulosa presente en los vegetales gracias a la fermentación microbiana.
El primer compartimento es el rumen o panza, el más grande, donde ocurre la fermentación inicial de la fibra vegetal por acción de microorganismos. El retículo o bonete, con su característica estructura en forma de panal, participa también en la fermentación y captura cuerpos extraños.
El omaso o librillo actúa como filtro, absorbiendo agua y nutrientes, mientras que el abomaso o cuajar es el verdadero estómago glandular, similar al de los monogástricos, donde se secretan jugos gástricos para continuar la digestión química.
🐄 La capacidad del rumen de un bovino adulto puede alcanzar los 200 litros, permitiendo almacenar grandes cantidades de alimento fibroso mientras es fermentado por billones de microorganismos.