Teorías de la Evolución: Lamarck vs Darwin
La teoría de Lamarck propone que los organismos cambian según sus necesidades. Según él, si el ambiente cambia, el organismo altera su comportamiento, lo que lleva al uso o desuso de ciertas partes del cuerpo. Estos cambios luego se heredan a sus crías.
El ejemplo clásico es el de las jirafas: Lamarck creía que las jirafas tienen cuello largo porque sus ancestros se estiraban para alcanzar hojas altas, y ese cuello estirado se transmitió a las siguientes generaciones. Sus principales ideas incluían que el ambiente cambia constantemente, que los órganos se desarrollan con el uso y se atrofian con el desuso, y que estos cambios adquiridos se heredan.
La teoría de Darwin y Wallace revolucionó la ciencia con el concepto de selección natural. Ellos propusieron que los organismos mejor adaptados sobreviven y tienen más descendencia, mientras que los menos adaptados no prosperan. A diferencia de Lamarck, Darwin planteaba que la evolución ocurre por reproducción diferencial: los individuos más aptos dejan más descendientes.
💡 La gran diferencia: Lamarck creía que los cambios ocurrían porque los organismos "querían" mejorar, mientras que Darwin demostró que ocurren por selección natural de variaciones aleatorias que resultan ventajosas.
Para Darwin, es fundamental la variabilidad entre individuos y que los rasgos sean heredables. Un detalle importante: si un rasgo ayuda a sobrevivir pero no a reproducirse, no tiene valor evolutivo, pues lo que impulsa el cambio es la transmisión de características a la siguiente generación.