La Edad de los Metales y el Surgimiento de Civilizaciones
Con la Edad de los Metales llegamos al nacimiento de las primeras grandes civilizaciones como Mesopotamia y Egipto. Este período se caracteriza por el desarrollo de la metalurgia, comenzando con el cobre, siguiendo con el bronce y finalmente el hierro.
Estas civilizaciones tempranas compartían elementos comunes: sociedades altamente jerárquicas y estamentales, ciudades como centros urbanos, e imperios teocráticos donde el poder político y religioso estaban unidos. Eran además civilizaciones hidráulicas, establecidas cerca de ríos importantes.
La religión jugó un papel fundamental en estas sociedades. Eran principalmente politeístas (creían en muchos dioses) y naturalistas, vinculando sus deidades con fenómenos naturales. Este sistema de creencias ayudaba a explicar el mundo y justificaba la organización social y política.
⚒️ ¡Importante! La metalurgia no solo significó mejores herramientas y armas, sino que transformó completamente las sociedades, creando nuevas desigualdades sociales y la necesidad de expandirse territorialmente para obtener recursos minerales.