De la Hacienda al Salitre: Transformación Económica
La hacienda fue una unidad productiva fundamental en Chile durante el siglo XIX. Su importancia radicaba tanto en su producción agropecuaria como en las relaciones sociales que allí se establecían. Los trabajadores podían ser peones (trabajadores libres contratados temporalmente) o inquilinos (trabajadores permanentes que recibían techo y comida a cambio de trabajo continuo).
En Magallanes, las estancias ganaderas importaron animales de alta calidad desde Holanda, destacando la introducción de ovejas merino productoras de carne y lana. La demanda de alimentos generada por la actividad salitrera fomentó la producción agropecuaria del Valle Central.
El ciclo del salitre (1880-1930) marcó una nueva etapa de bonanza económica. Tras la Guerra del Pacífico, Chile incorporó las provincias de Tarapacá y Antofagasta, monopolizando el mercado mundial del salitre. Este mineral representó el 75% de las exportaciones chilenas y se usaba como fertilizante y para fabricar explosivos.
Las consecuencias del auge salitrero fueron significativas: aumentaron los ingresos fiscales, crecieron ciudades del norte como Iquique y Antofagasta, y se realizaron importantes inversiones en obras públicas y educación.
💡 ¡Importante! Durante la segunda mitad del siglo XIX, Chile adoptó principios de libre mercado donde el Estado se limitaba principalmente a recaudar impuestos, dejando la iniciativa económica en manos de los privados.