Violaciones a los DD.HH. en Chile: La Parrilla
Entre los métodos de tortura más crueles utilizados durante la dictadura militar chilena destacó "la parrilla", un sistema de aplicación de electricidad que causaba dolor extremo sin dejar marcas evidentes en el cuerpo.
Este método consistía en amarrar a la persona a un catre metálico, completamente desnuda y con los ojos vendados. Luego, se le aplicaban descargas eléctricas en distintas partes del cuerpo, especialmente en zonas sensibles como genitales, pezones, orejas, encías y lengua. Para aumentar la conductividad, a menudo se mojaba a las víctimas.
El sistema incluía varios componentes: las correas para sujetar a la víctima, el maquineador que generaba la electricidad, el inspector que dirigía la sesión de tortura, y otros elementos como la toalla usada para mojar a la persona. Este refinado sistema de tortura fue diseñado específicamente para causar sufrimiento extremo sin dejar evidencia médica visible.
Los testimonios de sobrevivientes describen esta experiencia como una sensación de "fuego por dentro", dolor insoportable y convulsiones incontrolables. Muchas víctimas sufrieron secuelas permanentes, tanto físicas como psicológicas, por estas torturas.
💡 Contexto histórico: Documentos desclasificados posteriormente revelaron que algunos de estos métodos de tortura fueron enseñados por agentes extranjeros en el marco de programas de "contrainsurgencia" durante la Guerra Fría, evidenciando la dimensión internacional de estas prácticas represivas.