La expansión económica de Chile
Cuando Chile logró su independencia, la industrialización ya estaba en marcha en Europa. Aunque nuestro país comenzó a organizarse como Estado, en lo económico mantuvo características coloniales importantes: la hacienda seguía siendo el centro productivo principal y concentraba gran parte de la fuerza laboral.
Entre 1850 y 1860, Chile experimentó un período de crecimiento económico basado en la exportación de trigo, plata y cobre. Estos productos eran obtenidos de manera tradicional y artesanal por propietarios chilenos, aunque algunos empresarios comenzaron a invertir en infraestructura para mejorar sus negocios. Este período permitió aumentar los ingresos del Estado y crear los primeros bancos y la bolsa de valores.
A partir de 1880, tras la Guerra del Pacífico, Chile incorporó las provincias de Tarapacá y Antofagasta, convirtiéndose en el único productor mundial de salitre. Este mineral, usado como fertilizante y para fabricar explosivos, era muy demandado por Europa. Aunque la mayoría de los yacimientos eran explotados por extranjeros, el Estado chileno recibía importantes ingresos por impuestos, que se invertían principalmente en infraestructura y educación.
🌟 Recuerda: El modelo económico chileno del siglo XIX se conoce como "primario exportador" o de "desarrollo hacia afuera", porque dependía de la exportación de materias primas sin procesar.