Fundamentos de disolución y propiedades termodinámicas
La disolución de un soluto en un solvente depende de tres interacciones clave: solvente-solvente, soluto-soluto y solvente-soluto. Este proceso ocurre en tres etapas: separación del solvente, separación del soluto y finalmente la mezcla de ambos.
Durante la disolución se producen cambios de entalpía, que representa el calor generado o absorbido. Si ΔH es positivo, el proceso es endotérmico (absorbe calor), como ocurre en las primeras etapas de separación. Si ΔH es negativo, el proceso es exotérmico (libera calor).
La solubilidad está afectada por varios factores importantes: la naturaleza del soluto y solvente (lo semejante disuelve a lo semejante), la temperatura, y la presión (esta última principalmente cuando el soluto es un gas).
⚡ Dato clave: El agua es un excelente disolvente de compuestos iónicos debido a su polaridad. Cuando los iones se rodean de moléculas de agua orientadas específicamente (hidratación), se estabilizan y se evita que los cationes se combinen con los aniones.
Las propiedades constitutivas como la viscosidad, densidad y conductividad eléctrica dependen de la naturaleza de la solución y no solo de la cantidad de partículas disueltas.